El Centro Rural de Atención Diurna (CRAD) presentó el pasado 17 de marzo su memoria anual correspondiente al año 2022. En el acto, al que asistieron tanto el alcalde de Iruña de Oca, Miguel Angel Montes, como la concejala de Cultura, Julia Rivas y el concejal de Deportes, Mikel Pérez Santamaría, las responsables del servicio, acompañadas por los usuarios del mismo, dieron cuenta tanto de las actividades realizadas, como de la organización y planes de mejora del centro para el ejercicio 2023.
La memoria detalla que, durante el año 2022 el Centro de Día atendió las necesidades de un total de 18 personas, de las cuales 13 acuden al mismo a jornada completa. Para ello, el CRAD cuenta con tres profesionales durante toda la jornada de apertura, que planifican y adaptan sus funciones, tareas, ubicación, según la situación del grupo de personas usuarias. Este equipo, explica la memoria, realiza una formación continua, realizando diferentes cursos a lo largo de este ejercicio, tales como “actuación en personas en situación de dependencia”, “resolución y orientación psicologica en la resolución de conflictos”, “primeros auxilios y prevención e intervención en episodios de atragantamiento” o “prevención del suicidio en personas mayores”.
Respecto a las mejoras introducidas a lo largo de 2022, el Ayuntamiento de Iruña de Oca ha dotado al CRAD de nuevo equipamiento, consistente en una bicicleta estática, que ha servido para incentivar el ejercicio físico dentro del centro cuando no se puede hacer en el exterior y también se ha adquirido una lavadora y una freidora de aire.
En el transcurso del año 2022, el Centro Rural de Atención Diurna ha conseguido recuperar gran parte de las actividades que se desarrollaban antes de la pandemia, destacando los encuentros con otros grupos que venían colaborando con el centro, como el de Cáritas o el encuentro navideño intercentros.
Además, como explicaron las responsables del centro, se han organizado diversas actividades relacionadas con la igualdad, tanto en el mes de marzo como en noviembre y se han seguido desarrollando distintos programas individualizados con las personas usuarias como paseos en grupo e individuales, lectura individual de prensa, musicoterapia, talleres, puzzles, canto, fichas de memoria, bicicleta o sopas de letras.